Hábitos y redes

Hace unos días subí una secuencia de historias sobre cómo se ve mi mañana. Esto fue un martes, entonces coincidió con clase de italiano y a eso súmale que seguía sin ducha, entonces me estaba bañando y desayunando en la casa de mi papá. 

Empecé a tomar fotos de todo lo que iba haciendo en la mañana: corrí, mi papá hizo desayuno, me tomé un café y me fui para mi casa porque tenía clase de italiano. Después de italiano organicé todo lo de Emilio, me senté a trabajar y finalmente la última historia fue haciendo un batido verde de los que me estoy tomando. 

Cuando las terminé de subir quedé como pensativa porque dije, ¿será que lo que estoy compartiendo antes es contraproducente y genera presión en las personas a estar ocupados todo el tiempo? ¿Que tenemos que llenar la mañana de actividades “productivas” y de “bienestar”? La verdad cuando comparto este tipo de cosas es en lo último que pienso porque como soy una morning person, para mi es completamente normal, pero sé que no todos estamos en las mismas condiciones para tener una rutina así, o simplemente no es el objetivo de todos tener una mañana así.

Me gusta hacer lo que más puedo por la mañana porque después de las 2 – 3pm yo ya soy un ser casi inservible jajaja. Me cuesta más concentrarme, prefiero hacer cosas más relajadas, descansar, porque además como madrugo tanto a entrenar y trabajo todo el día, ya para las 4 – 5 de la tarde me siento cero productiva.

Quiero resaltar varias cosas con esto:

  1. No nos cerremos en pensar en que para tener hábitos hay que hacerlo igualito a esas personas que vemos en Instagram. Si me ves un día subiendo en historias de que corrí a las 5, desayuné a las 6 y tuve clase de italiano a las 7, quiero que sepas que la única razón por la que lo comparto es porque así se vio mi mañana y lo disfruté de principio a fin. Mi intención es motivar de alguna manera a que de pronto alguien quiera madrugar un poquito más, a darse cuenta que en 3 horas podemos hacer muchas cosas, pero si no lo hacemos también está bien. No tienes que hacer muchas cosas para sentir que estás construyendo hábitos o que estás aprovechando el tiempo.
  2. Filtremos más el contenido que consumimos. Si ver que alguien hace mil cosas antes de las 7am te genera estrés o ansiedad, por ahí no es. Ya las redes sociales nos ponen una presión social innecesaria como para que tú mismo te tortures con más contenido que no te hace bien. Si tu instagramer favorito entrena a las 5am pero a ti te gusta más a las 7pm esta PERFECTO.
  3. No hay una fórmula o forma perfecta para hacer las cosas. Cada uno le puede agregar o quitar según objetivos, necesidades, tiempo, estilo de vida, etc. De varias personas puedes aprender cositas que te sirven de cada uno y hacer tu fórmula única para una rutina perfecta para ti.

Recuerda que las personas que comparten contenido en redes, solo comparten un pequeño porcentaje de sus vidas y de su día a día. No siempre estamos al 100%, no siempre estamos con la motivación ni las ganas a tope, no todo es tan lindo como se ve en las fotos y es importante recordarlo siempre que empecemos a idealizar y comparar.

Con cariño,

JuliRuns

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *